Antonio Ávila
El secreto de las acciones efectivas contra las amenazas naturales en ocasiones se encuentra en los laboratorios, donde los científicos planean la manera de contrarrestar sus efectos nocivos.
En el universo virtual de las epidemias, como en el de los expertos en huracanes que alertan con anticipación sobre la trayectoria de un fenómeno que amenaza a zonas pobladas, aparece un novedoso modelo computacional desarrollado en la UNAM, el cual simula la expansión de una epidemia para intentar predecir el avance de un potencial nuevo brote de la influenza AH1N1.
Los hombres de ciencia laboran en el Centro de Investigaciones Interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades (CEIICH) de la UNAM, bajo la mirada del Doctor en Matemáticas Ricardo Mansilla Corona. Allí se trabaja desde octubre de 2009 en un modelo computacional en el que virtualmente surge y se expande la enfermedad por todo México.
La idea es que esté lista para su aplicación a mitad de 2010. Funciona con nodos que representan a los mil 565 poblados del país que tienen más de cinco mil habitantes. Estos sitios tienen mayor probabilidad de sufrir un ataque del virus, y por ello, desde la computadora se les sigue de cerca.
El modelo incluye una urbe virtual parecida a la Ciudad de México y su área metropolitana, pues cuenta con 20 millones de habitantes que caminan, se encuentran y transitan, de ida y vuelta, de su casa a la escuela o el trabajo, en rutinas constantes que permiten a los expertos predecir hacia dónde se dirigirá cada persona.
Inteligencia epidemiológica
La forma tradicional de enfrentar una epidemia inicia tras el brote y desarrollo de la enfermedad, cuando se toman medidas sanitarias para contenerla en las regiones donde emergió, y se aplican vacunas que eviten más enfermos y contagios. VIS