Silvia Ojanguren
Los médicos cuentan con un fármaco para tratar la enfermedad renal crónica, se trata de inhibidor del cotransportador de sodio-glucosa tipo 2 (iSGLT2) de Boehringer Ingelheim, aprobado por la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios.
En el Día Mundial del Riñón (13 de marzo) se recordó que la enfermedad renal crónica es un problema de salud pública porque está relacionada con enfermedades cardiovasculares y diabetes.
El innovador tratamiento tiene potencial de modificar el pronóstico de salud en 13 millones de mexicanos que se estima viven con este mal.
Estudios demostraron que logra una reducción significativa en el riesgo de progresión del daño renal y muerte cardiovascular.
Pasó las pruebas
El ensayo EMPA-KIDNEY demostró una importante reducción en el riesgo de la primera hospitalización y de hospitalizaciones recurrentes por ERC.
Esto representa un impacto positivo para la calidad de vida de los pacientes y contribuye a aliviar la carga económica al sistema de salud.
Según el médico José Ricardo Correa Rotter esta enfermedad se caracteriza por un deterioro progresivo de la función renal.
En etapas avanzadas deriva en complicaciones cardiovasculares graves e insuficiencia renal, condición altamente incapacitante, porque el paciente requiere de diálisis o trasplante de riñón para sobrevivir”.
“El uso de terapias iSGLT2 representa un avance significativo en el manejo de la enfermedad renal crónica, ya que han demostrado ser fundamentales en la modificación de la enfermedad:
“Al ralentizar o retrasar su progresión, así como reducir el riesgo de muerte por causas renales y cardiovasculares, mejorando significativamente el pronóstico… ”, subrayó Correa Rotter.
La doctora Arias Mendoza destacó que la integración de esta terapia en el tratamiento proporciona un enfoque innovador que de manera simultánea facilita el control de los riesgos amplificados por la interrelación de las afecciones cardiovasculares, renales y metabólicas, reestableciendo su equilibrio y retrasando la presencia de complicaciones.
Celebramos el poder brindar a la comunidad médica y a los pacientes una poderosa molécula que cubre todo el espectro del Síndrome Cardiorrenal Metabólico, dijo la doctora Guillermina Muñoz de Boehringer Ingelheim.
Mencionó que cuenta con tres indicaciones que ofrecen beneficios terapéuticos en el manejo de diabetes mellitus tipo 2, insuficiencia cardiaca y enfermedad renal crónica.
Así reduce el riesgo de complicaciones y mortalidad en más de 1400 millones de personas en el mundo que cursan con una o varias de estas enfermedades.
“Asimismo, y como parte de la estrategia de comunicaciones a escala global, Boehringer Ingelheim lanzó la iniciativa:
“Se necesitan dos ‘(‘It takes 2’), cuyo objetivo es elevar la importancia del diagnóstico temprano de la ERC. Y es que sólo se necesita una prueba de orina y una de sangre para que el médico pueda confirmar si los riñones no están funcionando correctamente”, informó la doctora Muñoz.
