LO PEOR DE LOS MALOS JEFES

LO PEOR DE LOS MALOS JEFES

Apuntes de Vida… Idea Segura

Hay días en que todo parece salir mal, peor aún, que existe una conspiración que pone todo en contra de uno, y casi siempre ocurre que tiene que ver con un mal jefe. Expertos en cuestiones laborales nos cuentan que un liderazgo mal enfocado  o un clima laboral negativo, se convierten en verdaderos dolores de cabeza para los empleados.

Puede provocar estrés e insatisfacción laboral entre quienes tienen que lidiar con un jefe “incompetente”. Es probable que el trabajador esté realmente comprometido con la empresa e incluso disfrute de las labores que realiza, sin embargo, toparse con un superior así, puede provocar desmotivación y frustración; emociones que lo orillan a tomar la decisión de renunciar.

Un líder que no está preparado para el rol que asume dentro de la compañía, presenta las siguientes características: no es apto o no está capacitado para el puesto, delega en exceso las actividades a sus subordinados, tarda en tomar decisiones importantes que beneficien al equipo y/o empresa, se involucra poco con la gente que le rodea y por lo tanto carece de información de sus empleados, somete a presión, entre otras.

Margarita Chico, directora General de Trabajando.com México, recomienda que “lo más importante es aprender a ser tolerantes e inteligentes para actuar de la mejor manera, un empleado jamás podrá correr al jefe ni podrá tomar decisiones acerca de su destino, sin embargo, tiene el poder de demostrar con su trabajo cuáles son sus capacidades y quién es dentro de la empresa”.

Existen algunas medidas que pueden ser tomadas en cuenta para sobrellevar la situación y aminorar los malestares  que desencadenan el deseo de salir de la empresa.

Un subordinado siempre debe respeto: es importante reconocer que el jefe tiene poder, y ante los ojos de los demás él tiene “razón”, por este motivo, es importante evitar evidenciarlo o acusarlo frente a sus superiores.

No declarar la guerra: aunque le gustaría hacerle la vida imposible a su jefe porque está cansado de “hacer su trabajo”, es vital que se fomente el trabajo en equipo, convertirse en su aliado, tratar de mostrarse receptivo a sus observaciones.

Negociación: buscar la manera de hacer sinergia para que de manera diplomática pueda orientar a su jefe sobre cómo ejecutar el trabajo, sin que él se ofenda o se sienta amenazado.

Alinear criterios: trabaje de manera autónoma y busque la unión de sus ideas con las de su jefe, de esta manera se agregará más valor al trabajo en conjunto que se realice.

Buscar aliados: la mejor manera de mostrar el trabajo y el esfuerzo de cada uno es siendo honestos y proactivos, al tiempo que se sugiere construir una red al interior de la organización, para que ellos sin que usted delate, se den cuenta del potencial que posee y puedan promoverlo para su crecimiento profesional.

Solicitar un cambio de área: finalmente si ya siente demasiada molestia, puede acudir al área de recursos humanos y comentar que ya se siente listo para dar un paso más y tomar mayores responsabilidades por lo que solicita un cambio de área. Jamás hable mal de su jefe, mejor sea propositivo y ofrezca soluciones. VIS