Sofía Romero
El queso es uno de los alimentos que más se consumen en el mundo, en cada país hay variedades especiales, pero hay una cosa que hace de la mayoría de los quesos algo inigualable y es su valor nutritivo.
Este producto se obtiene de la leche y su composición nutrimental lo hace equivalente a otros alimentos de origen animal como el huevo, pollo, res o pescado, lo que lo hace esencial para el crecimiento sano de los niños, que bien alimentados tienen un mejor rendimiento escolar.
Expertos de la productora de quesos Chilchota recomiendan que los niños y adolescentes consuman dos o tres vasos de leche al día y coman de 50 a 100 gramos diarios de queso a partir del primer año de vida y dependiendo de la ingesta de otras fuentes de proteína de origen animal.
También mencionan que es rico en proteína, indispensable en la formación y reparación de los tejidos del cuerpo, como la masa muscular, células de la sangre, piel, células de cada órgano y sistema de defensa contra enfermedades.
A la hora de ir a clases, Chilchota es tu mejor compañero y trae estas riquísimas opciones para el lunch:
• Sándwich de jamón con queso panela acompañado con lechuga y jitomate para hacerlo más nutritivo.
• Quesadillas con queso asadero con un toque de aguacate y jitomate.
• Sincronizada de jamón, frijoles y queso Oaxaca.
• Fruta con yogurt de distintos sabores.
“Sabemos que el consumo de queso es fundamental, por eso en Chilchota estamos comprometidos con la fabricación de los quesos más frescos y nutritivos”, dice Juan Carlos Burillo, vocero de la quesera.
Edgar González, chef del Restaurante Saltapatrás y de Grupo Chilchota, recomienda incluir en la dieta diaria todos los grupos de alimentos, ofrecerlos variadamente y en cantidades adecuadas. “El niño debe consumir cereales para el aporte de energía, alimentos de origen animal para el aporte de proteína que forme los tejidos que van creciendo y desarrollándose, así como frutas y verduras para el aporte de vitaminas, minerales y fibra”, concluye. VIS
